Conoce todo acerca del «Campo Volcánico Fuy»

La zona, cercana a Puerto Fuy, tiene al menos 20 cráteres, algunos de ellos relacionados con el volcán Mocho y otros con desarrollo independiente. Una de las erupciones pasadas permitió la creación del lago Pirihueico, al bloquear con lava la quebrada por donde fluye el río, y represar sus aguas.


Vía Sernageomin
Vía Sernageomin

Puerto Fuy.- Con la finalidad de hacer un llamado a la comunidad a contribuir con la conformación de un banco de fotografías ciudadanas de los volcanes de la zona, el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), se ha referido a los distintos edificios volcánicos presentes en la zona, entre ellos el Campo o Grupo Volcánico Fuy, prácticamente desconocido por la comunidad local pese a que fue descubierto a comienzos de la década de 1970 por la institución. Cabe señalar que se habla de “grupo” o “campo” volcánico para aludir a múltiples cráteres de diversa composición química. Esto lo diferencia del “complejo” volcánico, que en general tiene una composición química algo más homogénea.

La entidad -que informa el monitoreo volcánico a través de la cuenta de Twitter @Sernageomin-, ha señalado que “llama la atención el relativo desconocimiento de la comunidad sobre este patrimonio, sus posibilidades de desarrollo y sus peligros asociados. El Sernageomin tiene interés en socializar la información geocientífica, con la finalidad de que la gente separa cada vez más al respecto, y pueda al mismo tiempo desarrollar más cariño por su patrimonio natural y participar en la generación de planes de contingencia para casos de erupción y evacuación. Lo importante es tener presente una visión compleja de los volcanes, porque tienen múltiples usos, y no procede reaccionar ante ellos con tanto miedo, sino con inteligencia y sobre la base de información. Para eso existe la tecnología de monitoreo montada en los volcanes, y para eso estás las instituciones dedicadas a la elaboración y difusión de planes de acción”.

Cabe señalar que el Grupo Volcánico Fuy, emplazado en el entorno de Puerto Fuy en la comuna de Panguipulli, tiene al menos 20 centros de emisión  con antecedentes eruptivos previos a la historia humana. Se trata de montañas de baja altura, cubiertos de vegetación. Aquellos cráteres más cercanos al complejo volcánico Mocho-Choshuenco tendrían una composición química similar a éste, de manera que se presume una relación a través de una misma cámara magmática. La divisoria está dada por el río Fuy, de manera que aquellos cráteres más alejados al Mocho-Choshuenco serían centros de emisiones más independientes. “Se habla mucho de Puerto Fuy, y del río Fuy, pero no se habla del grupo volcánico Fuy, que también existe y está activo”. Lo anterior, según diversos estudios realizados por los volcanólogos Moyra Gardeweg, Daniel Sellés, y también Luis Lara y Hugo Moreno, autores del mapa geológico de esta zona, publicado en Sernageomin.cl.

Cabe señalar que la región de Los Ríos destaca por la cantidad y variedad de macizos, donde se encuentran los volcanes Quetrupillán, situado en el número 12 del Ranking de Peligros del Sernageomin; el Carrán-Los Venados (30); y los mencionados Mocho-Choshuenco (18) y Grupo Volcánico Fuy (79), situados en la comuna de Panguipulli. Adicionalmente, en la frontera de las regiones de Los Ríos y de la Araucanía se encuentra el volcán Villarrica (1), mientras que en el límite con la región de Los Lagos está el Cordón Caulle (11).

«LOS VOLCANES NO ESTÁN CONECTADOS, PERO SI ESTÁN RELACIONADOS» explicó, dado su ubicación en determinadas zonas de la cordillera de los andes, parte del arco volcánico.

El Sernageomin ha declarado que “esta zona es particularmente rica en presencia de volcanes activos, lo que la convierte en una de las regiones de interés para el estudio geocientífico de la Red Nacional de Vigilancia Volcánica del Sernageomin. Lo importante es que la gente disponga cada vez más de información sobre los volcanes cercanos, y particularmente que se comprenda que están asociados a diversos usos y desarrollos, como por ejemplo el turismo, las culturas indígenas, la presencia de aguas termales, el potencial geotérmico, y los peligros volcánicos. Todo esto amerita una visión compleja; o sea, alejada de enfoques simplistas, que permita a la comunidad cohabitar de manera inteligente con los volcanes y no sólo a reaccionar con miedo. Lo importante es que cada comuna se organice desde la municipalidad para disponer de planes de contingencia participativos”.

Cabe señalar que como una forma de contribuir al posicionamiento del tema de los volcanes activos, el Sernageomin está desarrollando un proyecto denominado “Chile, país vivo”, que consiste en la preparación de un libro de colección, de acceso público a través de internet, que contendrá fotografías y mapas de los 90 grupos de volcanes activos presentes en Chile. Para ello, ha convocado a la población a enviar fotos ciudadanas de sus volcanes cercanos más cercanos a través del correo comunicaciones@sernageomin.cl

 


 


 

 

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